INGREDIENTES (2 personas):
Puerro, 400 gr (4 puerros)
Jamón cocido, 200 gr (en lonchas finas)
Cebolla, 100 gr
Leche entera, 1/2 litro
Queso parmesano, 50 gr (puede servir cualquiera para gratinar)
Mantequilla, 15 gr
Harina de trigo, 2 cucharadas colmadas
Aceite de oliva, 3 cucharadas
Pimienta negra, 1 pizca (molida)
Nuez moscada, 1 pizca
Sal, 1 cucharadita
ELABORACIÓN:
1- Lavamos y limpiamos bien los puerros, los cortamos en trozos de unos 12 cm y los cocemos durante 15 minutos en una cazuela cubiertos de agua, con sal al gusto.
2- Una vez cocidos los puerros, los escurrimos bien y los envolvemos, de uno en uno, con las lonchas de jamón cocido, reservándolos para más adelante.
3- A continuación prepararemos una bechamel (o besamel) con cebolla, poniendo para ello una sartén con el aceite al fuego y sofriendo la cebolla cortada en trozos muy pequeños. Cuando tome color añadiremos la mantequilla, y cuando ésta se haya deterrido, la harina, que rehogaremos durante un par de minutos antes de ir agregando la leche poco a poco (cuanta menor diferencia de temperatura más rápido ligará), para ir pasando de una masa espesa a la textura cremosa de la bechamel, mientras vamos dando vueltas para que no se agarre. Cuando la hayamos logrado, añadiremos sal, nuez moscada y una pizca de pimienta (opcional) según el gusto de cada cual. Una vez cocinada la bechamel la podemos pasar por el pasapuré o por el chino para que quede más suave.
4- Finalmente extenderemos una fina capa de bechamel en el fondo de una fuente de cerámica o cristal, sobre la que colocaremos los puerros, que cubriremos después con la bechamel restante. Espolvoreamos el queso por encima y gratinamos durante unos 5 minutos en el horno.